Se cumplen 56 años de la declaración del primer Parque en Colombia y en su día de conmemoración vale la pena recordar los retos que tienen las autoridades para su protección.
El Parque Cueva de los Guácharos fue la primera área de Colombia declarada parque nacional en 1960. Pertenece a la Reserva de la Biosfera Cinturón Andino declarada por la UNESCO en 1979 y desde entones cada año se conmemora la creación de esta figura de protección de áreas especiales de biodiversidad.
Cerro Tatamá, en el Parque Nacional Tatamá. /Foto: Carder.gov.co
En la actualidad son 59 áreas naturales pertenecientes al sistema de Parques que representan más de 14.2 millones de hectáreas de la superficie nacional. Las mismas han sido exhibidas durante todo el miércoles en medios de comunicación y redes sociales.
Sin embargo el día de celebración también ha servido para llamar la atención frente a los grandes retos que tienen las autoridades de cara a su protección:
En primera instancia la deforestación los tienen altamente amenazados. Según el más reciente informe del Sistema de Alertas Tempranas de Deforestación del Ideam, en la jurisdicción de cinco Parques Nacionales se concentra el 63% de las alertas detectadas. Estos parques son: Sierra de La Macarena, Tinigua, La Paya, Ciénaga Grande de Santa Marta y Cordillera de Los Picachos.
A eso se suman los cultivos ilícitos, hace algunas semanas en el reporte de la UNDOC se advirtió que “de 59 áreas protegidas en la categoría Parque Nacional Natural; para 2015, se identificó afectación por presencia de coca en 16 de ellas. El área con coca en parques naturales representa un 0,04% del total protegido en el país y el 6,5% del total sembrado con coca en 2015”.
Y como si fuera poco la minería ilegal se ha tomado varios Parques. Tal vez el caso más preocupante el de los Farallones de Cali donde desaparecieron, para abastecer la actividad ilegal, la quebrada El Socorro que transportaba más de 800 litros de agua por segundo para los ríos Felidia y Cali. Casos similares se han presentado en por lo menos tres departamentos.
Las amenazas latentes sobre los Parques Nacionales Naturales
Se cumplen 56 años de la declaración del primer Parque en Colombia y en su día de conmemoración vale la pena recordar los retos que tienen las autoridades para su protección.
El Parque Cueva de los Guácharos fue la primera área de Colombia declarada parque nacional en 1960. Pertenece a la Reserva de la Biosfera Cinturón Andino declarada por la UNESCO en 1979 y desde entones cada año se conmemora la creación de esta figura de protección de áreas especiales de biodiversidad.
En la actualidad son 59 áreas naturales pertenecientes al sistema de Parques que representan más de 14.2 millones de hectáreas de la superficie nacional. Las mismas han sido exhibidas durante todo el miércoles en medios de comunicación y redes sociales.
Sin embargo el día de celebración también ha servido para llamar la atención frente a los grandes retos que tienen las autoridades de cara a su protección:
En primera instancia la deforestación los tienen altamente amenazados. Según el más reciente informe del Sistema de Alertas Tempranas de Deforestación del Ideam, en la jurisdicción de cinco Parques Nacionales se concentra el 63% de las alertas detectadas. Estos parques son: Sierra de La Macarena, Tinigua, La Paya, Ciénaga Grande de Santa Marta y Cordillera de Los Picachos.
A eso se suman los cultivos ilícitos, hace algunas semanas en el reporte de la UNDOC se advirtió que “de 59 áreas protegidas en la categoría Parque Nacional Natural; para 2015, se identificó afectación por presencia de coca en 16 de ellas. El área con coca en parques naturales representa un 0,04% del total protegido en el país y el 6,5% del total sembrado con coca en 2015”.
Y como si fuera poco la minería ilegal se ha tomado varios Parques. Tal vez el caso más preocupante el de los Farallones de Cali donde desaparecieron, para abastecer la actividad ilegal, la quebrada El Socorro que transportaba más de 800 litros de agua por segundo para los ríos Felidia y Cali. Casos similares se han presentado en por lo menos tres departamentos.
Pero no solo las actividades ilegales han amenazado la reserva. Cabe recordar que en los últimos meses la descoordinación dentro de las autoridades ambientales pusieron en la agenda pública casos como los de La Macarena y el Valle de Cocora donde se alertó por la posible entrega de títulos mineros y petroleros en zona de protección o en sus áreas de amortiguación