Nuevo mapa geológico antártico con última información de zonas con acceso remoto, fue diseñado por un grupo de científicos procedentes de Argentina y España. La herramienta ha despertado el interés de expertos en el tema, al punto que los coordinadores del proyecto esperan digitalizarlo y diseñar una versión a modo de GPS para dispositivos móviles, antes de finalizar el 2014.
El proyecto que viene trabajándose hace diez años, logró reunir importantes datos actualizados de las bases antárticas argentinas de Marambio y Esperanza. Según Sergio Santillana, Geólogo del Instituto Antártico Argentino (IAA) “Los mapas están elaborados con la última información geológica de zonas de alto interés científico. Los anteriores eran muy viejos, con una fotografía a veces deficiente que llegaba a crear confusión sobre el lugar en el que estabas, no eran fácilmente identificables y ahora están bien referenciados”.
Para su elaboración, el grupo de geólogos realizó un arduo trabajo de campo, basándose primero en fotografías aéreas, las cuales fueron el punto de partida para el diseño de mapas topográficos de la zona de influencia. A partir de ahí, ellos recorrieron toda la geografía capturando las “curvas de nivel” con bosquejos hechos a mano, para luego de la mano con diseñadores y especialistas en digitación, elaborar la propuesta computarizada “Estamos contentos con el resultado y sabemos que por lo menos servirán durante los próximos 10 a 15 años, hasta que se hagan nuevos descubrimientos”, Señaló el funcionario del Instituto argentino.
Así mismo, las cartas geológicas se hicieron en escenarios naturales específicos para obtener información milimétrica, contrario a las ya existentes que son a gran escala y se centran en información de un vasto territorio. “Nosotros estos mapas no los hicimos a escala particular de la isla, sino del sector que se quiere analizar. Están hechos en detalle particularmente de la isla Marambio y de la zona de Bahía Esperanza, ambas de mucho estudio e interés científico”, explicó Santillana.
La versión digital del mapa traerá grandes ventajas para la ciencia, puesto que con ella, los geólogos obtendrán mayor información de manera rápida y precisa. Por otro lado, al ser este un proyecto compartido, la mitad de la producción se ubicará en el Instituto Antártico Argentino, mientras que la otra estará disponible en el Instituto Geológico y Minero de España. “En España se pueden adquirir, pero nosotros no los vendemos, eso sí puede ser consultado por los investigadores y especialistas para su trabajo”, concluyó.