Aunque tenía permiso para un vertimiento controlado, el cual estaba incumpliendo, la empresa Pimpollo habría creado la manera para hacer otros depósitos ilegales que afectaban al Río Otún.

La Corporación Autónoma Regional de Risaralda, CARDER, realizó una visita de seguimiento y control a la planta de beneficio de Pimpollo, localizada en la vía al corregimiento de La Florida (Pereira), lugar donde encontró por lo menos dos irregularidades en el vertimiento de aguas residuales hacia el Río Otún.
“Después de una denuncia ciudadana nos desplazamos hasta el sitio con los profesionales de la Corporación, con quienes constatamos que las aguas residuales no estaban siendo evacuadas como lo establece la norma, además, sin los permisos requeridos, por lo tanto procedimos a imponer las medidas preventivas, que consisten en suspender los vertimientos”, advirtió Carlos Arcila, subdirector de gestión ambiental sectorial de la CARDER.
Estos vertimientos, sin el debido tratamiento avalado por la Corporación generan contaminantes que llegan a la bocatoma del Río Otún, que en últimas es la principal fuente de abastecimiento de agua de Pereira y Dosquebradas.
Pero los alcances de la investigación podrían ir mucho más allá. Los expertos de la Carder encontraron además que aparentemente la empresa creó una cámara para verter sin permiso y sin el tratamiento adecuado, “lo que genera la peor afectación por olores en el sitio”.
Los controles se dieron por las denuncias que desde hace varios meses están haciendo los vecinos de la fábrica que alegaron constantes malos olores en el río.