Miércoles, 23 Abril 2025
Consejo de Estado ordena a Alcaldía de Salento y a un privado restaurar humedal El Mudo.
 
En 2009 comenzó la adecuación del terreno para construir 45 casas en el lote Montearroyo, una zona de protección ambiental en jurisdicción del municipio de Salento, Quindío.
 
Ese mismo año, la Fundación Bahareque impuso una acción popular en defensa de los derechos colectivos en contra de las obras que empezaron a deteriorar el humedal El Mudo, que hoy tiene una afectación del 85 por ciento. En este humedal nace la quebrada del mismo nombre, que vierte sus aguas al río Boquerón y que a su vez desemboca en el río Quindío.
 
En 2013, el Tribunal Contencioso Administrativo del Quindío falló en primera instancia a favor de la Fundación. Sin embargo, María Isabel Hernández, propietaria del lote, impugnó la decisión argumentando que ya se habían vendido 15 parcelaciones y que la realización de las construcciones se había “realizado conforme a la ley”.
 
No obstante, en fallo de segunda instancia, el Consejo de Estado dejó en firme su decisión la semana pasada y ordenó a la Alcaldía de Salento y a la dueña del predio adelantar obras de mitigación y restauración tras el impacto ambiental, bajo la supervisión de la Corporación Autónoma Regional del Quindío (CRQ).
 
“Es responsabilidad del Estado y responsabilidad civil defender bienes de uso público. En últimas, es la defensa de la vida. Se trata nada más y nada menos que del agua”, aseguró Jaime Hernán Arias, representante legal de Bahareque.
0
0
0
s2smodern