En un 20 por ciento creció el número de víctimas por oleadas de calor durante la primera década del siglo XXI en relación a la última del siglo pasado. Huracanes como Katrina, en Estados Unidos o ciclones como el Nargis en Birmania, fueron los eventos naturales que más marcaron la curva de crecimiento en los fallecimientos por el cambio climático.
Según el estudio “El estado del clima mundial 2001-2010” que fue realizado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), "Con la excepción de 2008, cada uno de los años de la década 2001-2010 figura entre los diez más cálidos jamás registrados, el récord fue en 2010".
El secretario general de la OMM, Michel Jarraud, también fue enfático en señalar que el ritmo decenal de aumento en la temperatura que se presentó entre las décadas 1991 – 2000 y 2001 – 2010 no tiene precedentes en la historia.
"Las concentraciones crecientes de gases de efecto invernadero, que retienen el calor, están transformando nuestro clima, con los cambios que eso implica para el medio ambiente y los océanos", agregó Jarraud.
Este calor récord estuvo acompañado de un derretimiento de las capas de hielo que tuvo como consecuencia el aumento de la media mundial del nivel del mar, la cual creció unos 3 milímetros por año, casi el doble de la media del siglo XX que era de 1,6 milímetros, es decir, 20 milímetros más que en 1880.
En este decenio las temperaturas se situaron 0,47 grados centígrados por encima de la media de temperaturas máximas que hubo entre 1961 y 1990.