El felino (Puma concolor) fue visto por primera vez en el Parque Nacional Natural Chingaza, a unos 1.700 metros sobre el nivel del mar. Otros dos felinos también fueron registrados en el lugar.
El hallazgo se dio el pasado mes de mayo en el sector del Piedemonte en Medina, Cundinamarca, semanas después de que la comunidad reportara su presencia, lo que indica, según Parques Nacionales Naturales (PNN), que esta área protegida cuenta con un hábitat eficiente dotado de agua, buena oferta de presas para su alimentación y grandes extensiones de vegetación para el desarrollo de su ciclo de vida.
El descubrimiento se dio gracias al uso de tecnología de fototrampeo ubicada en el lugar, durante el desarrollo del programa de monitoreo e investigación de vida silvestre del Parque, con lo que se pudo captar a este felino de hábitos solitarios y alta actividad nocturna. Justo hace tres años el Parque Nacional Natural Las Orquídeas también entregó noticias de un puma en su área, lo que brinda un buen indicador sobre dicha especie en Colombia.
El puma, advierte PNN, se encuentra regulado en el Apéndice I de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), por lo que la comercialización de especímenes o sus partes es considerada ilícita. “Esta especie fue catalogada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza como especie casi amenazada, dejando abierta la posibilidad de que pueda ser considerada como vulnerable cuando se disponga de más datos sobre su distribución”, explica la entidad.
De acuerdo con la información entregada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, también se registró la presencia de un tigrillo del que ya se tenía informacón desde hace seis años, y de un tercer animal que aún no ha sido identificado en las imágenes.

Parques Nacionales catalogó como histórico el registro del puma, por ser una especie muy difícil de captar / Foto: Fundación Panthera