Reducir la huella hídrica de la ciudad en un 30 por ciento para 2038 y hasta un 40 por ciento en el año 2050 es la conclusión que dejó La Cumbre del Clima que terminó ayer 23 de septiembre en Bogotá.
El foro organizado por la Alcaldía Mayor de Bogotá y sus entidades distritales con el apoyo de organizaciones locales, nacionales e internacionales, sirvió de preparación para la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP21).
Este espacio de movilización y discusión de las ciudades frente al calentamiento global, contó con la participación de invitados internacionales como el canciller boliviano, David Choquehuanca; Alione Badiane, director de la oficina regional para África y los Estados Árabes de ONU-HABITAT; Gino Van Begin, secretario general del Consejo Internacional para las Iniciativas Ambientales Locales, ICLEI; Bernard Cassen, periodista destacado del movimiento antiglobalización, así como uno de los impulsores del Foro Social Mundial; Jorge Riechmann, profesor de filosofía moral en la Universidad Autónoma de Madrid; Ricardo Arnoldo Navarro Pineda; presidente de CESTA Amigos de la Tierra en El Salvador.