Sábado, 26 Abril 2025
Catorce6 consultó la posición del Gobierno, la industria y el promotor de la ley de renovables en el Congreso para contrastar las versiones sobre el proceso que se aplazó.
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La primera subasta de energías renovables, que se llevó a cabo este martes, no tuvo el éxito que esperaba el Gobierno. Una segunda convocatoria será programada para el segundo trimestre de este año.

Ese aplazamiento se dio porque la CREG había exigido tres indicadores para cumplir con el proceso, pero sólo se cumplió el de participación. Los de concentración y dominancia fallaron.

Para el Gobierno, aunque no se logró la adjudicación, es una buena noticia lo que pasó este martes porque se cumplió con alto interés y participación de las empresas para cumplir con el objetivo de aumentar, de 50 megavatios, a por lo menos 1.500 megavatios de capacidad instalada en fuentes no convencionales de energías renovables.

En la actualidad, cerca del 70 por ciento de la energía que se produce en el país proviene de fuentes hídricas. Esto hace que nuestra matriz sea considerada como la sexta más limpia del mundo, según el Consejo Económico Mundial. Sin embargo, también nos lleva a ser uno de los países más vulnerables a la variabilidad climática.

"La participación de proyectos de energías alternativas nos hace ser optimistas para el camino que viene. Hoy evidenciamos suficiente oferta para cumplir la demanda objetivo y todas las tecnologías presentaron precios competitivos. En esta participación fue evidente que las energías alternativas pueden, incluso, ofrecer al mercado energía a largo plazo a precios significativamente inferiores a los que hoy se cierran en contratos bilaterales, entre generadores y comercializadores de energía", explicó la ministra de Minas y Energía, María Fernanda Suárez, en un comunicado.

Según informó la cartera, en esta primera subasta participaron 12 ofertas de compra y 8 de venta, luego de presentar las garantías de seriedad y quedar habilitadas tras una estricta evaluación de los criterios de calificación, por parte de la Unidad de Planeación Minero Energética (UPME) en los siguientes cuatro aspectos: resiliencia, complementariedad, seguridad energética nacional y reducción de emisiones.

Los industriales, agremiados en la Asociación de Energías Renovables de Colombia, tienen una posición muy cercana a la del Gobierno, aunque reconocieron que se deben mejorar cosas para lograr la adjudicación en la próxima subasta.

“Esto lo que quiere decir es que nos encontramos en un proceso de aprendizaje, que hay un gran interés en el incorporación de las FNCER (Fuentes no convencionales de energía renovable) en la matriz eléctrica del país, que se pueden mejorar algunos aspectos con miras a la segunda subasta y que Colombia quiere hacer las cosas bien hacia la transición energética”, afirmó German Corredor, director de la Asociación.

En contraste, el presidente de la Comisión Quinta del Senado y quien fue autor de la ley 1715 sobre Energías Renovables, el Senador José David Name cuestionó el “fracaso” de la primera subasta. ”Nos retrasa en el desarrollo de las energías renovables, es lamentable que por un mal diseño en las condiciones de las competencias por parte de la CREG, se haya obtenido este resultado, aún cuando la participación fue exitosa” expresó.

Según el congresista, es hora de revaluar el papel de la CREG en la cartera de minas y energía nacional, “una entidad sin logros, que en cada acción nos retrasa en términos de desarrollo, servil a las grandes hidroeléctricas y que hoy en día no es más que una carga burocrática sin justificación. El mal diseño de la subasta no puede esconderse detrás de la voluntad del sector real de pagar o no un precio mayor, de haberse estructurado correctamente este proceso, en el que coincidieron oferta y demanda abundante como ocurrió, hoy estuviéramos celebrando la adjudicación de más de 1000 megavatios hora/año por 12 años”.

Argumenta que se establecieron unos indicadores de competencia excluyentes y desbalanceados. “Queda la inquietud de qué pasaría en una próxima subasta si se mantiene la misma dirección”, concluyó.
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