Miércoles, 16 Abril 2025

Deforestación e invasión de riberas hechas por el hombre dejaron los suelos sin defensas ante un periodo de lluvias sin precedentes. El último reporte de la avalancha da cuenta de 248 muertos.

mocoa

Foto: Twitter @Ximena_Ramirez7

Una tragedia sin precedentes vive el departamento de Putumayo. En la madrugada de este sábado una avalancha de lodo y escombros cubrió por completo más de 5 barrios de Mocoa. Muchas de las personas en el sitio no han dudado en calificarlo como un ‘segundo Armero’.

El último balance de Medicina Legal este domingo da cuenta de 248 personas muertas y según el Ministerio de Ambiente Mocoa recibió aproximadamente 11.357.000 metros cúbicos de lodo y escombros.

Varios fueron los factores que pudieron haberse unido para terminar detonando la tragedia de este fin de semana. En primer lugar la deforestación cerca a las fuentes hídricas, como lo reconoció el ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo “se presentan por deforestación en partes altas. Tomemos conciencia de la importancia de conservación de los ecosistemas”.

“Recordemos que los bosques sirven como administradores del agua. En épocas de pocas lluvias permiten que el líquido salga de forma controlada y se evita la sequía, y en la temporada de invierno acumulan el recurso dosificando su escorrentía, pero cuando privamos a los ecosistemas de coberturas vegetales, el agua desciende sin barreras”, agregó Murillo en declaraciones a medios de comunicación.

Para el exministro Manuel Rodríguez, no hay duda que fue la principal causa. A través de su cuenta en Twitter aseguró que “A cada avalancha siempre sigue la explicación de la deforestación y la promesa de detenerla pero la deforestación continúa derrotándonos… ayer fue Mocoa, hace dos años fue Salgar. En ambos casos se señalan como causas: la pobreza, la deforestación, la desidia oficial”.


Y es que la problemática no es menor. El más reciente informe de Sinchi y Parques Nacionales que fue publicado en los últimos años señala que en el amazonas se deforestó un área equivalente a 5 millones de canchas de fútbol, siendo precisamente Putumayo uno de los departamentos más afectados.

Otro tema, reiterativo, es la construcción de casas y asentamientos humanos en zonas inundables. Precisamente Sinchi ha sostenido en las últimas horas que allí en Mocoa se repitió ese fenómeno que caracteriza a todos los municipios que son vulnerables ante inundaciones y deslizamientos.

En el mismo sentido, el ambientalista Gustavo Wilches Chaux, sostiene que las tragedias no son naturales ni castigos de dios sino que las acciones humanas son las mismas que han venido ocasionándolos.


¿Tragedia anunciada?

A todo esto se sumó el nivel de lluvias del viernes en la noche en Mocoa y que fue avisada 6 veces por el Ideam a los organismos de riesgo de ese municipio. “De acuerdo a las mediciones del Ideam, se logró evidenciar que en 3 horas cayó el 80% de lluvias de lo que cayó todo el día en la ciudad de Mocoa”, aseguró Omar Franco, director del Instituto.

En una declaración citada por El Espectador, Luis Alexander Mejía Bustos, director de Corpoamazonía, aseguró que “hace nueve meses cuando hicimos un taller con el Servicio Geológico Colombiano donde advertimos que esto podía pasar por el uso inadecuado de los suelos que agrava este tipo de eventos. Además, indicamos que varios municipios amazónicos, incluido Mocoa, no habían actualizado su Plan de Ordenamiento Territorial (POT). Por eso ha sido complejo concertar e implementar los determinantes ambientales en esta zona”.

Por supuesto eso se suma a los estudios de deforestación de diferentes entidades, donde no solo se mostraban las cifras de pérdida de bosque sino también de las posibles afectaciones que esto podría causar.

0
0
0
s2smodern