El Banco Mundial (BM) manifestó este miércoles su preocupación por la pasividad de la comunidad internacional, para contener el aumento de la temperatura planetaria en 2o C con relación a los niveles preindustriales.
Según el presidente del organismo, Jim Yong Kim, si no se controla el cambio climático y se llega al calentamiento previsto, en 2040 se presentarían “penurias alimentarias”, cuyos principales afectados serían los países en vía de desarrollo, que paradójicamente, “son los menos responsables del calentamiento”.
"Temperaturas extremas podrían afectar a las cosechas de arroz, de trigo, de maíz y a otros cultivos importantes y amenazar la seguridad alimentaria de los países pobres”, advierte la institución.
Según las previsiones del informe, en África, por ejemplo, la producción agrícola subsahariana disminuirá a largo plazo un 10 por ciento y la región perderá el 40 por ciento de las tierras dedicadas al cultivo del maíz en 2030. Así mismo el BM señala que el índice de personas que sufren malnutrición podría alcanzar a largo plazo el 90% en algunos países africanos.
Esto quiere decir que el calentamiento del clima podría complicar el objetivo del Banco Mundial de erradicar la extrema pobreza antes de 2030.
Las catástrofes naturales.
El BM también fue enfático en advertir múltiples catástrofes derivadas del aumento en la temperatura, por ejemplo, el organismo señaló que las inundaciones masivas que afectaron a 20 millones de personas en Pakistán en 2010 podrían convertirse en algo común.
En India podrían registrarse sequías muy violentas y la subida de las aguas en en el sudeste asiático, asociada a ciclones, podrían sumergir una gran parte de Bangkok en 2030, según el informe.
El 19 de noviembre pasado, el Banco Mundial había lanzado una primera alerta sobre el cataclismo que provocaría un aumento de 4ºC de la temperatura en 2060: "Un mundo con +4ºC desencadenaría una cascada de cataclismos, entre ellos olas de calor extremas, una caída de los stocks de alimentos y aumento del nivel del mar que afectarían a millones de personas".
"Hay que hacer bajar la temperatura y sólo una acción internacional coordinada y rápida puede lograrlo", concluyó el Banco Mundial.