En la actualidad los embalses solo presentan un 37% de su capacidad total informaron la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y su Red Hidrometeorológica.

Foto: CAR
Por cuenta de los bajos niveles de los ríos y embalses de la cuenca alta y media del Río Bogotá registrado por la Red Hidrometeorológica de la CAR Cundinamarca, la Fuerza Pública ejercerá un fuerte control para evitar las captaciones ilegales, vertimientos y mantener el caudal del río que hace la comunidad.
Por esta razón, el Ejército Nacional, a través del grupo mecanizado número 10 Tequendama; la Policía Nacional, Cundinamarca, Ambiental y Carabineros, apoyarán a la Autoridad Ambiental en la realización de operativos de seguimiento y control ambiental en 52 puntos identificados donde existen captaciones ilegales y vertimientos que afectan el caudal y la calidad de agua del río.
El Director General de la CAR, Néstor Franco aseguró “Llevaremos a cabo los operativos donde, al encontrarse usuarios captando ilegalmente y contaminando el agua, generando afectaciones ambientales y que disminuyen los niveles del afluente, tendrán que someterse a procesos sancionatorios y judiciales, pues ahora necesitamos mantener el río con buena capacidad de transporte de agua”.
Los datos actualmente registrados afirman que son 13 metros cúbicos de caudal por segundo de descarga de agua del sistema de embalses del norte que hoy llegan al río (Tominé 7m3/s, Sisga 4m3/s y Neusa 2m3/s), y en la cuenca alta se registra un promedio de precipitaciones acumuladas a la fecha de 20 mm, considerado como una disminución de las lluvias, insuficientes para la recuperación de los embalses, con base al promedio de precipitaciones para esta época del año.
Adicionalmente, y debido a que la Empresa de Acueducto de Bogotá - EAB se encuentra haciendo mantenimiento a los túneles de Chingaza, encargados de transportar el agua desde la cuenca de la Orinoquía para el servicio de la capital (donde se aporta cerca del 60% de la demanda de Bogotá), se requiere compensar los volúmenes de agua del Río Bogotá en la cuenca alta, a través de los sistemas de embalses del norte que hoy están bajos, pues solo están en un 37% de su capacidad total.
Cabe aclarar que la autoridad ambiental asegura que a raíz de estos inconvenientes, la capital del país no sufrirá ninguna clase de razonamiento y el abastecimiento de agua para los hogares seguirá sin ningún contratiempo.