Evidencias de hidrógeno molecular, hacen creer a la comunidad científica que la sexta luna más grande de Saturno podría albergar vida extraterrestre.
La sexta luna más grande de Saturno lleva por nombre Encélado y tras una investigación realizada con la sonda Cassini y el Telescopio Espacial Hubble, la Nasa ha reportado que dicha luna contiene elementos químicos que funcionan como indicadores de vida en la Tierra. Encélado tiene unos 500 kilómetros de diámetro y posee una corteza de hielo de 40 kilómetros de grosor. Es precisamente bajo esta corteza que se cree podría albergar algún tipo de microoganismo vivo.
Foto tomada de www.bbc.com
La misión logró obtener muestras de agua que estaban siendo expulsada desde el interior de la capa de hielo hacia la superficie de Encélado. Una vez analizadas las muestras, los científicos comprobaron la existencia de hidrógeno molecular, el cual sólo pudo haberse formado a través de la reacción entre piedras calientes y agua bajo la superficie de hielo. El hidrógeno es una excelente fuente de alimento y combustible para antiguas formas de vida, las cuales posteriormente producen metano, un gas que ya había sido detectado en esta luna.
Tras este importante descubrimiento, se está planeando una segunda misión para obtener pruebas concretas de vida en Encélado. Científicos alrededor del mundo concuerdan que las posibilidades de vida extraterrestre en este satélite son altas pues las tres condiciones para que se dé la vida ya existen allí: agua, moléculas orgánicas y una fuente de energía.
Fuente: Truth Theory, La Tercera.