Colombia cuenta con 85 tipos de ecosistemas continentales, costeros y marinos. De estos tres escenarios ya hay información detallada sobre el cambio de las características de su territorio.
Datos como que el departamento con menos grado de transformación de sus ecosistemas con respecto a su área total es Amazonas, con el 1%, y que en caso contrario el más transformado es el Quindío, con el 81%, están consignados en el Mapa de Ecosistemas Continentales, Costeros y Marinos de Colombia (Ecmc), entregado por el Ideam. La investigación sumó el conocimiento de Parques Nacionales Naturales de Colombia (PNN) y el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC), para finalmente presentarlo al Ministerio de Ambiente.
La información consignada en el mapa revela que hay 26 ecosistemas. Por ejemplo, el costero continental e insular da cuenta de 8 ambientes, uno de ellos transformado; en cuanto a los terrestres continentales e insulares, 26 ambientes son naturales y 9 están transformados, y con respecto a los acuáticos, 15 aún son naturales y solo 1 transformado.
Ómar Franco, director del Ideam, opina que entidades regionales, incluidas las CAR, a las que el Presidente Santos les llamó la atención una vez más en su gobierno (vea Santos pide a las Farc respetar el ambiente y transparencia a las CAR), no han tenido en cuenta estas herramientas para tomar decisiones de prevención o mitigación sobre sus territorios. Esos pormenores fueron presentados ante los directores de las 33 corporaciones que asisten al Encuentro de Articulación por el Crecimiento Verde, del Sistema Nacional Ambiental (Sina), que hoy completa su segunda jornada.
“A veces dicen que la información no está presentada en la escala indicada. El país no va a poder pasar de escalas 1:100.000, en la que se hizo el estudio, a una más sectorizada como la 1:25.000, en términos de conocimiento y aproximación, en una temporalidad de 5, 10 o 15 años. Mientras se niegan tanto, el territorio va con problemas de mal uso en medio de un desorden en el aprovechamiento de los recursos”, dijo.
Para el director del Ideam, por ahora no se pueden fraccionar los ambientes, por el contrario, los municipios comparten páramos, bosques secos que son corredores de fauna y flora y que no conocen de límites geográficos: “No pueden tomarse como quien fracciona una finca. Usted no puede fraccionar ecosistemas boscosos porque son corredores, son biomas completos, y es a esa regionalización a la que le estamos apuntando”, dijo.
Franco instó a los gobernantes actuales y a los próximos elegibles a tomar en cuenta los estudios que la entidad ha presentado este año, como el mapa de erosión de suelos, antes de contratar estudios regionales de impacto con terceros.
“Hay información suficiente en el país para tomar decisiones. Se requiere voluntad política y técnica para poder implementar la información que entregamos. No contraten estudios, hay que valerse de la institucionalidad. Debe hacerse adaptación”, concluyó.
Otros datos
En el país predominan los ecosistemas marinos con 92.866.000 de hectáreas de mares, dentro de las cuales solo ha sido posible identificar el 0,51%, es decir, 472.688 hectáreas.
En los ecosistemas insulares de San Andrés y Providencia, equivalen a un área de 5.902 hectáreas, el manglar y el bosque basal inundable ocupan el 5% del área, mientras que el bosque seco y el complejo rocoso equivalen al 43%. El oro, con el 52% restante, se encuentra transformado y ocupado por vegetación secundaria o territorios artificiales.
Los ecosistemas terrestres continentales equivalen a 93.524.000 hectáreas, de las cuales se han transformado 31.638.007 hectáreas de bosques, sabanas, páramos, desiertos y afloramientos rocosos.