A la hora de escoger las frutas, verduras y hortalizas la apariencia casi siempre es asociada con la calidad, sin embargo los alimentos de aspecto extraño resultan siendo iguales o mejores.
Según la Food & Alimentation Organization (FAO), es una tendencia mundial que los consumidores vinculen el aspecto externo como presentación, apariencia, uniformidad, madurez y frescura y pasen por alto la calidad interna – sabor, aroma, textura, valor nutritivo, ausencia de contaminantes bióticos y abióticos– al momento de escoger los alimentos.
Sólo con observar no se puede saber si una fruta está inmadura o no posee un buen sabor, textura o aroma; ni sólo con tocar se puede medir la firmeza y otras características. Un informe de la FAO indica que el aspecto perceptible no es forzosamente sinónimo de componente de calidad. “La apariencia es uno de los subcomponentes más fácilmente perceptibles, aunque en general, no es un carácter decisivo de la calidad, a no ser que se trate de deformaciones o de defectos morfológicos. En algunos casos la forma es un indicador de la madurez y por lo tanto de su sabor.”

Las variantes que se deben considerar al momento de elegir frutas, verduras y hortalizas en el mercado son: frescura, madurez, color, brillo, textura y firmeza. /Foto1: ecoosfera.com
En algunos casos los defectos morfológicos o fisiológicos en las frutas, verduras y hortalizas pueden estar relacionadas con el clima, variedad, suelo, riego o fertilización, durante la etapa de crecimiento, los cuales no afectan en absoluto su calidad interna ni sabor, es decir que los defectos no afectan realmente sus cualidades comestibles. También la mala manipulación durante la comercialización son causantes de podredumbres y defectos físicos que inciden en la adquisición.
La recomendación de la FAO a los consumidores es que pruebe algunas frutas y verduras de aspecto poco atractivo y hagan uso de alimentos que de otro modo podrían desperdiciarse. Las frutas o verduras de aspecto extraño, a menudo, se desechan porque no cumplen con los estándares estéticos. Pero, de hecho, su sabor es el mismo, si no mejor.
Lo que dicen los expertos es que una alimentación balanceada entre alimentos naturales, proteínas y nutrientes, reestablece el vínculo con la naturaleza y brinda una sensación de bienestar, plenitud y energía, por eso la importancia de escoger los alimentos adecuados, que no siempre están relacionados con su aspecto físico.