Es un tema que se ha convertido en dolor de cabeza en muchos aeropuertos del país pues obliga a la cancelación frecuente de vuelos.
Imagen de referencia. / Foto: Vanguardia Liberal
En un 80% se han reducido las colisiones con aves en la Base Aérea Marco Fidel Suárez desde que se inició una estrategia de manejo para proteger las aeronaves, las aves y por supuesto las vidas humanas, porque algunos vuelos pueden presentar fallas de seguridad después que un animal entra en su motor.
Un caso reciente es el del avión que despegó en Estados Unidos y que tuvo que aterrizar en el río Hudson por una colisión con aves. En Colombia se han presentado atrasos y cancelación de vuelos en ciudades como Pereira y Bucaramanga, entre otras.
“La prevención es lo más importante y hay que mantener un balance entre la seguridad y el cuidado del medio ambiente“, aseguró el coronel Andrés Guzmán, encargado del Comando Aéreo de Combate Número 7.
Y es que en el Valle del Cauca hay más de 400 especies de aves, entre las que se encuentran azulejos, garrapateros, torcazas, carpinteros, garzas, pellares y piguas, entre otros. Por esa razón la escuela de aviación trabajó de la mano con la Corporación Autónoma del Valle para darle una solución integral al problema.
“Los biólogos de CVC recomendaron controlar el crecimiento de los pastos para evitar la producción de semillas que atraen a aves granívoras, ratones de campo e insectos que atraen aves insectívoras. Todos estos animales son a su vez presa de aves rapaces. También se instruyó a los soldados de la base sobre cómo hallar y recoger sin dañar los huevos de aves y trasladarlos”, dice Alejandro Rojas de la Dirección de Gestión Ambiental de la CVC.
De esa forma se ha logrado la reducción en el impacto de los animales contra las aeronaves y así ofrecer “una mayor seguridad para las tripulaciones, mejor aprovechamiento de recursos y una sinergia total entre el medio ambiente y la seguridad aérea”, como lo advierte el coronel Guzmán.
En otras ciudades como Bucaramanga, se está trabajando en la adquisición de herramientas como aves robóticas que espantan a los gallinazos de la zona de su aeropuerto, el Palonegro. Situación similar se presenta en Pereira, donde la cercanía del relleno sanitario multiplica la presencia de gallinazos.