Cortolima busca conservar la especie y la zona en la que habita esta ave rapaz catalogada en categoría de amenaza.
Foto: Cortolima
La Corporación Autónoma Regional del Tolima dio a conocer que se llevó a cabo el primer marcaje científico en el departamento al Águila Crestada, un ave rapaz catalogada para Colombia en categoría de amenaza, en peligro de extinción y que fue encontrada por los observadores de aves y comunidad del sector del Cañón de las Hermosas en Chaparral.
Es así como se procedió a informar a la Fundación Proyecto Águila Crestada – Colombia con el fin de realizar el monitoreo y seguimiento satelital de este individuo, acordándose que a principios de diciembre se adelantaría la respectiva actividad de marcaje.
Luego de cumplida la fecha, éste se llevó a cabo por un equipo conformado por Santiago Zuluaga biólogo de la Fundación, Diego Ceballos avistador de aves de la región y el propietario del predio donde se encuentra ubicado el nido del Águila en un árbol de cerca de 50 metros de altura.
“El proceso de marcaje consistió en tomar el pichón que se encontraba en el nido, se pesó y se le tomaron medidas morfometricas, se le instala un transmisor de telemetría para seguir sus movimientos y se le pusieron dos anillos en cada una de sus garras para poder identificarlo a la distancia” Afirmó el biólogo Santiago Zuluaga, Director de Fundación PAC-Colombia, y becario doctoral de INCITAP-CONICET (Argentina) y The Peregrine Fund (USA).
Así mismo, como parte del trabajo de conservación del animal, los profesionales realizaron encuestas en las veredas de la zona a fin de conocer la percepción que tienen los habitantes hacia la especie, donde se les socializó el proyecto para incluirlos al mismo, teniendo en cuenta su opinión y sus ideas para la conservación del Águila.
Desde el 3 de diciembre el transmisor está emitiendo datos del animal que dejan ver que hasta el momento continua en el nido, sin embargo, se espera que en un mes aproximadamente ya este saliendo a volar y empiece a recorrer la zona.
Qué se busca con este proyecto
Desde el año 2015 la Fundación Proyecto Águila Crestada - Colombia (PAC-Colombia) viene realizando marcajes de la especie en el país con el fin de determinar las amenazas hacia su supervivencia, debido a que se encuentra En Peligro de extinción.
Con esto se busca conocer las amenazas en las que se encuentra sometida la especie, principalmente por cacería y pérdida de hábitat, con esta información posteriormente se plantearan medidas para la Conservación y protección del Águila Crestada en cada zona.
Este proyecto se adelanta en 4 países de sur América, Ecuador, Perú, Argentina y Colombia; en total se ha logrado el marcaje de 10 Águilas, 4 de ellos el territorio colombiano, dos en jurisdicción de CORPOGUAVIO en el oriente de Cundinamarca en los años 2015 y 2018, uno en jurisdicción de la CAM en el sur del departamento del Huila en el 2019 y por primera vez en el departamento del Tolima en diciembre de 2019.
Sobre el Águila Crestada (Spizaetus isidori)
Esta águila es una rapaz que Mide entre 64 y 74cm de largo. Es grande y robusta con cabeza, cuello y dorso negros. Con una cresta aguda. Tiene las alas anchas pero proporcionalmente largas y por debajo son color crema con puntas negras y coberteras rufas.
Su cola tiene punta negra ancha y una franja ancha color gris pálido en la parte media. Tiene el pecho y las bajas partes inferiores castaño estriado de negro, las tibias son negras y los tarsos emplumados de castaño.
Su distribución se encuentra Desde los 1400 hasta los 3300m. El Águila crestada se encuentra en la Sierra Nevada de Santa Marta, Serranía de Perija y las 3 cordilleras. Con los nuevos registros y los antiguos se reporta la presencia de la especie en los siguientes departamentos: Antioquia, Boyacá, Caquetá, Cauca, Cundinamarca, Huila, Tolima, Magdalena, Meta, Nariño, Quindío, Risaralda y Valle del Cauca. También se encuentra en el norte de Venezuela y en el noroeste de Argentina.
Esta especie es considerada vulnerable ya que ha perdido el 63% de su hábitat, y ha visto una reducción de más del 30% de su población en tres generaciones. Su principal amenaza es la destrucción de los bosques primarios por la expansión de la frontera agrícola. También, aunque se desconoce la magnitud del problema, esta águila es víctima de la cacería ilegal.