El sistema de innovación sostenible de la FAO comprenden la captación y potabilización de agua lluvia (SCALL) como solución para combatir las enfermedades y la escasez de agua potable.
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El sistema SCALL tiene la capacidad de potabilizar 6,000 litros de agua diarios, lo que se traduce para cada familia semanalmente en 40 litros de agua envasada y tratada por las comunidades, asegurando un acceso constante a este recurso vital los 365 días del año.
El proceso de SCALL comienza con la captación y almacenamiento del agua lluvia en tanques modulares, con una capacidad de 50 mil litros. Posteriormente, el agua es dirigida por motobomba a un tanque de cloración. Una vez clorada, atraviesa un filtro que incluye arena, carbón y dos microfiltros, además de un regulador de pH, un equipo de luz ultravioleta y un generador de ozono.
Cada planta de tratamiento está equipada con paneles solares, que no solo alimentan el proceso de potabilización sino que también abastecen las necesidades comunitarias, ubicando la planta en la escuela de cada comunidad.
La gestión y operación de estas plantas están a cargo de las propias comunidades, capacitadas inicialmente por la FAO y respaldadas por el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA).
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Para asegurar la sostenibilidad financiera, se ha implementado un fondo rotatorio, administrado por un comité del agua en cada comunidad. La venta inicial del botellón, que incluye la base y la tapa dosificadora, tiene un costo de 2 mil pesos, mientras que la recarga se establece en 500 pesos por botellón. Los ingresos generados por la venta y la recarga de botellones contribuyen al mantenimiento de la planta y a la compensación de los operarios.
Este proyecto, es desarrollado en el marco del convenio Cancillería de Colombia - FAO, con el respaldo del Programa Mesoamérica sin Hambre AMEXCID-FAO, así como con las alcaldías municipales y gobernaciones departamentales, ha beneficiado a más de 1,200 familias en la Amazonía colombiana y se ha visto una disminución del 95% de casos de diarrea infantil. Su impacto en el acceso al agua potable resalta la interconexión vital entre agua, nutrición y salud, abordando directamente el derecho humano a la alimentación.