Investigaciones de la Universidad Estatal de Iowa sostienen que el cambio climático también incide en comportamientos negativos de las personas.

Craig Anderson, profesor de psicología en la Universidad Estatal de Iowa analizó comportamientos, pensamientos y sentimientos en entornos con diferentes temperaturas ambientales.
Según los resultados de la investigación, el calor extremo aumenta la irritabilidad y hostilidad, detonando así violencia en la sociedad y elevando las estadísticas de actos delictivos en las ciudades que presentan altas temperaturas.
En el estudio se analizó desde una sola ciudad, durante un par de semanas, hasta un continente por varios años, surgiendo de ello una tendencia general: los períodos más calurosos son más violentos, evidenciando así que el calor despierta la agresividad y que en épocas con mucho calor hay más delitos con violencia y aumentan las tasas de criminalidad.
En el estudio se analizó desde una sola ciudad, durante un par de semanas, hasta un continente por varios años, surgiendo de ello una tendencia general: los períodos más calurosos son más violentos, evidenciando así que el calor despierta la agresividad y que en épocas con mucho calor hay más delitos con violencia y aumentan las tasas de criminalidad.
Sin embargo, el investigador expone que el calor no es el único factor que podría modificar el comportamiento del ser humano, los desastres naturales, pérdidas en cultivos y la inestabilidad económica también pueden influir.
El desplazamiento de las familias a causa de un huracán o un incendio forestal, por ejemplo, se convierten en una alteración para el curso de la vida de las personas afectadas, lo que inevitablemente modifica su carácter.
Anderson señala además que el grupo más vulnerable son los niños y niñas, pues las malas condiciones durante la infancia, como lo sería una mala nutrición infantil y desorganización familiar, predisponen una personalidad más agresiva en la etapa adulta.
Un llamado a crear programas de prevención o modos de limitar las consecuencias de los desastres naturales, además de crear conciencia sobre los demás efectos del cambio climático, es el objetivo de la investigación.